Casa vista desde el jardín
El amplio espacio del jardín, acolchado por la hierba, nos permite correr libremente, jugar al balón, al pilla pilla o investigar hormigas y caracoles. Las sombrillas en el arenero y en el tobogán nos protegen del sol, ampliando la sombra de los árboles y la casita nos invita a crear infinitud de historias.
Jadín visto desde la casa
El domo para escalar nos permite desarrollar la coordinación, la fuerza y la atención.
Jugamos encima y debajo, dentro y fuera de él. creando retos de escalada o también cabañas al cubrirlo de ramas o telas.
Las posibilidades son tan infinitas como la imaginación de los niños.
Mesa del almuerzo
Comer en el jardín, bajo la sombra de la higuera en verano y bajo el suave sol en invierno, es uno de los placeres de estar en la casita de Pepa y Kika.
También utilizamos este espacio como taller artístico, cubrimos la mesa con un vinilo y ya estamos preparados para pintar, modelar o hacer experimentos con diferentes materiales.
Jardín visto desde la casa
En el jardín podemos encontrar el arenero, el domo para trepar, el tobogán, la casita y la cama elástica.
Banco con materiales didácticos
Juguetes de madera, instrumentos musicales, legos, peluches, telas, marionetas, pelotas, una gran variedad de materiales no estructurados para que los niños y niñas dirijan su juego según sus intereses y necesidades.
Espacio interior
El espacio interior, especialmente diseñado para el juego libre, consta de dos ambientes:
En el primer plano de la fotografía podemos ver un espacio diáfano con suelo acolchado. En el centro de este espacio cuelga una tela de algodón elástico, similar a las que se utilizan en los espectáculos de circo. En esta tela, los niños y niñas pueden columpiarse desde muy pequeñ@s, de una manera sencilla y segura.
En segundo plano nos encontramos con un espacio más recogido. Compuesto por un colchón, un suelo vinílico, la chimenea y el mueble donde guardamos la mayoría de los materiales de juego. En esta zona descansamos, leemos cuentos, hacemos construcciones, puzzles, juego simbólico, experimentamos con los instrumentos musicales, las marionetas y una multitud de materiales, todos no estructurados y de calidad.
La chimenea nos acompaña en invierno aportando calidez a cada momento.